domingo, 11 de agosto de 2019

23 Festival de Lima: Enigma (Competencia Ficción)

La ópera prima de Ignacio Juricic distribuye con reserva los detalles de una tragedia familiar que se expone de forma caótica y difusa. No hay pariente que logre expresar con precisión y linealidad los acontecimientos previos a la muerte de una de las hijas de Nancy (Roxana Campos), y eso, en efecto, es el propósito de este filme. Enigma (2018) retrata un testimonio colectivo plagado de interrogantes. Personajes comienzan a recordar y cotejar detalles entorno a una muerte que en su momento no se preocuparon por indagar a fondo o cuestionar. Aunque no existe una referencia directa al tópico, esta película chilena parece hacer una remembranza al fantasma histórico sobre desaparecidos no reclamados. Por cosas del destino, Nancy tendrá la opción de conocer los detalles de la muerte –muy violenta– de su hija.
Juricic atrae a esta madre al terreno de la redención hacia su ser querido que fue ultimada a manos del fanatismo o la tiranía; no se sabe. No hay seguridad del motor del crimen, y lo cierto es que la película no está interesada en aclarar ese punto. Su estímulo prioritario es el de remover la conciencia de los familiares, despertar la curiosidad y el compromiso de estos hacia la víctima, a fin de que rompan con un prejuicio socialmente latente que es una camisa de fuerza. Enigma relata la historia de una familia pasando por alto una tragedia con el fin de negar la condición homosexual de su familiar desaparecido. La homosexualidad para este grupo está más allá del tabú, es un tema de conversación que no dudan en censurar incluso al punto de dejar en vigencia la impunidad.

No hay comentarios: