lunes, 30 de enero de 2012

Los ilusionautas


Eduardo Schuldt estrena quinto filme, colocándolo posiblemente como uno de los directores más prolíficos en Latinoamérica durante estos últimos años en lo que se refiere a películas de animación. Los Ilusionautas (2012) apuesta por un clásico género que no tiene pierde: el de aventuras. Es el citado a historias de viajeros, máquinas del tiempo, ciudades bajo el agua, monstros marinos. Julio Verne es un referente absoluto en el filme que narra la trama de un grupo de niños que tendrán que viajar a un mundo ficticio para poner en orden los relatos novelados de un antiguo escritor a punto de ser revalorado...

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sábado, 21 de enero de 2012

Historias cruzadas (o The help)

La película dirigida por Tate Taylor sigue la larga lista de dramas sureños que tratan temas como el racismo, la amistad, la maternidad, esquemas que evocan la realidad angustiosa ocurrida por los años 50. The help se sostiene del drama convencional que no necesita de una historia compleja para provocar congoja; el tema de por sí es triste. Muy a pesar existen indicios dentro de la película que nos motiva a mirar detenidamente algunos tratamientos aplicados al filme...

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lunes, 16 de enero de 2012

"My French Film Festival": Festival francés online con acceso gratuito

Desde el pasado jueves 12 del presente mes, se ha iniciado "My French Film Festival" en su segunda edición, competencia que es admirada única y exclusivamente vía online en forma gratuita para el público en general y con derecho respectivo a que el mismo espectador pueda ser parte de las votaciones. El Festival concluye el 1 de febrero, fecha límite poder mirar entre largometrajes y cortos disponibles en su página oficial. El enlace de comunicado de prensa es el siguiente:

Con el objetivo de difundir a la nueva generación de directores franceses, una selección de 10 films y 10 cortometrajes podrán visualizarse en línea hasta el 1 de febrero de forma gratuita en el festival My French Film Festival.
En la segunda edición de este evento en línea, que en enero de 2011 superó los 230 mil visitantes, las 20 películas cuentan con subtítulos en español, inglés e italiano, entre otros 14 idiomas.
Todos se podrán visualizar gratuitamente hasta el final del festival, aunque para hacerlo será necesario registrarse en el sitio.
El público podrá votar entre las películas favoritas y, al final, se entregarán tres premios: el de los internautas, el de las redes sociales y el de la prensa internacional.
El festival es organizado por Allocine y UniFrance. (Fuente: TvPerú. Noticias Online)


viernes, 13 de enero de 2012

Crimen en familia (o All good things)


Capturing the Friedmans (2003) es un documental que retrata la vida de una familia común y silvestre que de pronto se ve envuelta por un crimen brutal, en principio lleno de incógnitas motivadas por la natural afección proporcionada por este grupo de personas que en función a sus antecedentes deberían ser inocentes. Elegido en distintas listas personales como uno de los mejores documentales, su director Andrew Jarecki replantea esta vez a nivel ficción un nuevo caso real: la historia de una acaudalada familia dedicada a la agencia inmobiliaria y su relación con la repentina desaparición de la esposa de uno de sus primogénitos. Crimen en familia (2010) es un thriller que gira en torno a una tragedia familiar, los traumas de la infancia y las posteriores consecuencias de un hijo plagado de conflictos mentales, víctima de una “castración” paternal que luego ha repercutido en su labor no solamente como esposo, sino como una persona, víctima de la frustración y la dependencia.


Andrew Jarecki retoma ese tema de la familia que oculta un rostro culpable. La historia se va sorteando entre el pasado y el presente, entre la muerte violenta de un ser querido y las consecuencias que trajeron este fatídico evento. Crimen en familia realiza una especie de “viaje a la semilla”, dinámica que no deja escapar detalle o razonamiento alguno sobre los sucesos criminales que ocurrirán más adelante. Esto es lo defectuoso en el filme, una actitud que desde un principio modela el rostro de un sujeto que lleva pegado en la frente un letrero que dice: “cometeré un crimen”. La película no da cabida a la imaginación o al suspenso, a la duda o algún indicio que muestra una brecha de que el culpable está libre de pecado. De repente el tema de la familia y las negociaciones ilícitas se pierden en medio del drama. De nada sirve la buena actuación de Ryan Gosling, Kirsten Dunst o Frank Langella, si a menos de la mitad nos hemos dado cuenta que la trama se encamina a un evidente desenlace, esto sin atrevimiento de inventar algún juego engañoso a medio camino, ninguna señal de afección al filme que motive a cuestionarnos cómo nunca se aclaró esa desaparición.