¿A qué viene el “Des-”?
Para no hacerlo muy dramático, iré al grano. Si bien fue una buena programación
el de esta edición, pésima fueron las nuevas normativas impuestas en el asunto
de acreditaciones de prensa. Repartir dos tipos de credenciales, sirviendo una
de estas tan solo para el acceso a eventos/actividades más no para el de las
funciones de cine, es igual a la negación total. Al menos resulta así para los interesados
en realizar críticas sobre las películas que se ven durante el Festival.
Una revista de crítica
de cine local en inicio fue excluida a la lista de los acreditados “parciales”.
Gracias al reclamo y posterior acuerdo, luego formaron parte de los
beneficiados.
Qué es sino la crítica
como una presencia imprescindible en todo Festival. Si no hay una voz crítica,
entonces los festivales de cine estarían al nivel de un espectáculo más.
Se espera que para el
próximo año los encargados de las acreditaciones sepan moderar sus filtros, así
como que sepan reconocer cuáles son los medios de “último minuto” y cuáles son
los más dedicados y activos en cuestión de difusión de cine.
De la misma forma, los
miembros de prensa que han tenido acceso para las funciones en las salas tuvieron
nuevos percances para ubicarse, caso en los establecimientos en Cineplanet dado
que los tickets comprados por el público eran numerados.
Debería destinarse un
área exclusiva para la ubicación de los medios de prensa, asientos numerados
que no estarían en venta para el público. Es una forma de prevenir el desorden especialmente
cuando la función ya haya iniciado. Ahora, colocar a la prensa en las dos
primeras filas de la salas es inadmisible, no solo para ellos, sino para todo
ojo humano. En principio eso no debería existir en cualquier cine, pero eso ya
es asunto de las exhibidoras.
En síntesis, un poco
más de conciencia para con los medios de prensa. No se trata de repartir
beneficios, sino el de identificarlos como un promotor más del Festival.
Nuestras películas preferidas: (las que de aquí a algunos años
seguiremos recordando)
The tribe: De lo mejor
del Festival que se haya visto. Una película que es un retorno al cine incipiente,
insólito en el circuito local y además de lo más reciente de uno de los
festivales de cine más reconocidos.
Cold in July: También
acoplado a un espectador comercial, es la película más democrática del
Festival. Buen cine que adopta un lenguaje ochentero.
The missing picture: Valioso documental y Rithy Pahn.
Otras a valorar:
It follows: Otra de formula
ochentera. Una slasher tensa y cómica.
Una fórmula de apariencia ridícula que funciona de punta a punta.
The Kindergarten teacher: Un cine políticamente sugerente.
The reunion: Un ejemplo
más sobre las modalidades de la docu-ficción. Algo de lo que está muy empeñado
la Gira Ambulante.
Jauja: Un nuevo
Lisandro Alonso que otorga una secuencia con una interpretación mucho más
amplia al de su acostumbrado estilo.
Algunas películas que
nos perdimos
P’tit Quinquin
Atlántida
El último verano
No se vió casi nada de
documentales tales como La muerte de Jaime Roldós o El color que cayó del cielo, que tuvieron buenos comentarios.
Cuatro películas
que no colmaron nuestras expectativas
Winter sleep: No es lo
mejor de Nuri Bilge Ceylan. Por detrás de Nubes
de mayo, aunque por muy encima de Tres
monos. Un cine de amplia perorata conflictiva y reflexiva. Los (des)encuentros
entre familiares, la frustración, el conformismo, la melancolía siguen siendo
temas frecuentes en el cine del director turco. El clima esta vez es menos
denso que en sus otras películas. Se le otorga un protagonismo más amplio al
diálogo que se desenvuelve más en un debate del presente. El pasado muy a pesar
sigue siendo excusa para cuestionar el hoy. La hostilidad de Winter sleep llega más por las palabras que
por el mismo contexto. Lo fantasmal, el inconsciente o la metáfora es otro
ausente en este último filme.
La danza de la
realidad: Un surrealismo más burtoniado que proveniente del mismo Alejandro
Jodorowski. Una película más lúdica, en ocasiones musical. Una biografía
infantilizada.
Tres D: Sí fue una
total decepción. Una película que debió de haber sido más bien un documental
sobre el cine argentino no comercial más reciente.
NN: Otra película que
debió de haber sido un documental. Ya se comentará en su momento (su estreno,
esperamos) sobre ella.
Lo mejor del Festival
No deja de ser grato tener la oportunidad de ver la más reciente ganadora del Festival de Cannes, además de la selección de la Semana de la Crítica; estrenos y ganadores de otros festivales como el Sundance; y, por último, la presencia de Bruno Dumont. El Festival de Lima, por ese lado, enmienda en parte ciertos sin sabores ya mencionados.