Extensa es la lista de directores que realizaron películas con el fin de representar mediante un carácter alegórico sus pensamientos sobre el arte y la creación. Christopher Nolan en The Prestige (2006), Leos Carax en Holy Motors (2012) o Federico Fellini con 8½ (1963). Es una demanda tan personal que casi ninguna de esas películas escapa de la fabricación de un alter ego que represente al director. Ahora, esa visión ficticia efecto de la introspección no se encierra en su propio mundo, sino que se pone a interactuar con un entorno, contexto o coyuntura. Varias de esas películas están pensadas en un presente o época en específica que dispersa una serie de pensamientos no necesariamente iguales al del creador. Es así como tenemos a un autor reflexionando dentro de un imaginario o sistema sostenido por específicas convenciones que bien alientan o restringen su libertad artística. Es en esa búsqueda que se concibe Megalópolis (2024). En esta historia, inspirada en los tiempos del Imperio Romano, el laureado arquitecto César Catilina (Adam Driver) reconoce a Franklyn Cicero (Giancarlo Esposito), el conservador alcalde de Nueva Roma, como su mayor antagónico, la autoridad que obstruye con sus planes de llevar a cabo su obra más ambiciosa: la construcción de Megalópolis.
lunes, 25 de noviembre de 2024
Megalópolis
domingo, 17 de noviembre de 2024
All You Need Is Blood
Película disponible en cines seleccionados de EE. UU., AppleTV y Amazon Prime.
Super 8 (2011), de J. J. Abrams, hasta el día de hoy me emociona, y no tanto por el relato ficticio que invoca los tópicos conspiratorios y seres de otro mundo que tuvieron su mejor momento en la década de los 50 en EE. UU., sino por el carácter personal que percibo, a propósito de que se inspira de la pasión hacia la realización del cine, ello forjado por una cinefilia pura y dura. No es la fantasía impulsada por el deseo de la fama. Es la emoción que estalla durante el proceso creativo, y no olvidemos que toda creación es íntima e individual, una selección medida por el juicio o el fanatismo. Super 8 es una película de oficio en su etapa de iniciación. Al mirar All You Need Is Blood (2023), me resulta familiar a esa búsqueda. Esta es la historia de un neófito director de cine movido por el instinto. Pienso en el director Mark Borchardt, personaje del documental de culto American Movie (1999), o en Le Livre des solutions (2023), una reciente película de Michel Gondry. Ahí tenemos a protagonistas que al igual que el personaje de Bucky Le Boeuf desborda pasión y va a contracorriente de los métodos tradicionales. Estamos ante artistas autodidactas, extasiados más con producir que con planear un plan. Hay mucha de improvisación en sus propuestas, pero, ciertamente, no deja de contagiar esa pasión que proyectan.
lunes, 11 de noviembre de 2024
10 Semana del Cine ULima: La semilla del fruto sagrado
A lo largo de su filmografía, el director Mohammad Rasoulof ha sido un mordaz crítico al régimen islámico en Irán. En adición, fue con su película There Is No Evil (2020), ganadora del Oso de Oro del festival de Berlín, que prestó una especial atención a las condenas por pena de muerte en su país. En dicha película, ese tema será motivo para representar distintos relatos a manera de episodios sobre personas inmersas en un conflicto moral. Sus personajes son los sujetos empujados a ser cómplices o hasta ejecutores de esas sentencias dictadas de forma arbitraria, prueba de que la Irán actual está bajo el yugo de un Estado que corrompe, oprime, amenaza y además es causante de una diversidad de crímenes de lesa humanidad. La semilla del fruto sagrado (2024) podría asumirse como un nuevo episodio de There Is No Evil, uno extenso y argumentalmente complejo. Iman (Missagh Zareh), padre de familia y fiel empleado de un juzgado estatal, acaba de ascender a un cargo clave que podría ayudarlo a convertirse en juez. Serían muy buenas noticias de no ser porque su nuevo puesto implica una obligación oficial que escapa de su evaluación personal. Nuevamente, el tema de la pena de muerte es centro del conflicto en una película de Rasoulof, el hecho es que el autor se las ingenia para invocar en su trayecto otros conflictos y efectos que son comunes y alarmantes en la actual Irán.
Ahora, de hecho La semilla del fruto sagrado es la historia de Iman y su familia. Entonces, mientras vemos al padre de familia reaccionando en las oficinas del juzgado, vamos viendo también a su esposa y dos hijas creando sus propias acciones y reacciones en casa. Llegará a un punto en que ambos escenarios no se diferenciarán el uno del otro. De pronto, la opresión y la corrupción a la que están sometidos los empleados en los espacios estatales se replica en los hogares, o al menos en las casas en donde los cabezas de familia son obedientes empleados del Estado, difusores de una ideología teocrática islámica, la que incluye decidir cómo una mujer debe vestir hasta castigar o desaparecer físicamente a cualquiera que esté en contra de sus normativas. Es así como va tomando forma una película con muchos actos, consecuencias y agravamientos, una dinámica que, ciertamente, no se define tanto en el escenario estatal u oficinas del juzgado, pero sí en el escenario íntimo familiar, lugar en donde la moral batalla porque todavía no ha sido anulada por la instrucción e intimidación. En el hogar de Iman, vemos a personajes resistiéndose a no ser subyugados por una autoridad abusiva, irracional y que se niega a cualquier acto de consenso o diálogo. La casa familiar parece una réplica al tercer escenario de la película: el espacio público o las protestas ciudadanas que acontecen en ese presente.
jueves, 7 de noviembre de 2024
10 Semana del Cine ULima: El reino
El principio de la ópera prima de Julien Colonna parece describirnos que estamos ante una coming of age. Lesia (Ghjuvanna Benedetti) es una adolescente que disfruta sus últimos días de vacaciones antes de retornar a la escuela. Las fiestas, las visitas a la playa y el descubrimiento sexual forman parte de su calendario diario. Esta agenda se cancelará abruptamente para cuando una moto la recoja sin previo aviso y la traslade a pasar unos días con un padre en estado de clandestinidad. El reino (2024) es la historia de una joven reconociendo un escenario que contrasta con las demandas de una chica de su edad. Muy a pesar, lo que veremos no deja de responder a la realidad en donde reposa su linaje, una feroz tradición a la que capaz la protagonista se adapta con naturalidad. De ahí los primeros minutos de la película, secuencia que además de augurar el sino de Lesia, puede ser interpretado como una suerte de ritual de iniciación al mundo de la camorra. Esto es importante si es que lo comparamos con una frase recurrente que pronuncia la muchacha cada que empuña un rifle de caza. Este es un relato sobre la corrupción, el ver o hacer cosas que tal vez no quieres, pero es necesario hacerlas porque los “tuyos” lo hacen. Estamos ante un entorno sostenido por un adiestramiento insidioso y progresivo que habitualmente no expone otras alternativas. Queda entonces ceder o asistir a la conciencia moral a fin de cuestionar el alrededor.
10 Semana del Cine ULima: Julie se queda callada
Por tradición, las películas sobre deportistas expuestos a las exigencias de una rutina competitiva nos han trasladado a historias que dialogan sobre la superación personal o revelan un panorama social desamparado, caso Chariots of Fire (1981) o The Loneliness of the Long Distance Runner (1962), respectivamente. Es decir, el deporte como excusa para mejorar o componer algo fracturado en la intimidad o entorno de los atletas. Ahora, en los últimos años, la frecuencia de este tópico, además de aumentar, nos ha venido revelando los “puntos ciegos” e insidiosos que a veces cobija dicha circunstancia. Desde I, Tonya (2017) hasta Nadia, Butterfly (2020), tenemos retratos de deportistas expuestos a una privación o violencia contra los estados naturales de cualquier persona. En otras palabras, si antes el mundo deportivo fue reconocido como lugar de refugio o método de rehabilitación, es partir de esas recientes películas que se lo expone como un espacio inseguro y nocivo producto de una toxicidad normalizada que se ha colado entre las rutinas o normativas deportivas. Por esa línea es que camina Julie se queda callada (2024). Esta es la historia de una talentosa tenista anímicamente paralizada ante un tema trágico que implica a su exentrenador. He aquí el caso de una “testigo” que opta por el silencio, lo que le irá generando un estado de conmoción y aturdimiento.
martes, 22 de octubre de 2024
Curso de terror online
Rednecks, brujería, muertos que vuelven a la vida, el slasher, vampiros, científicos locos,
criaturas surrealistas y del espacio exterior; son temáticas que serán
analizadas desde un perfil multidisciplinario, adoptando enfoques sociales,
políticos, feministas, psicoanalíticos, los estudios culturales y otras
lecturas.
METODOLOGÍA: Aprender de manera flexible
Este curso VIRTUAL se dividirá en 4 capítulos. Los lunes se liberará un capítulo. Cada uno contendrá 5 videos (7-15 minutos de duración c/u) e incluye material digital complementario. En el transcurso, el alumno podrá enviar preguntas o comentarios al correo del profesor para respuestas personalizadas. A modo de retroalimentación, los sábados de la semana correspondiente, se liberará un video o realizará una sesión en vivo* con una selección de las preguntas o comentarios más relevantes de la semana con el fin de exponerlas al resto de los alumnos y ampliar el contenido.
(*) Esto dependerá
del aforo de asistencia. De darse el caso, se celebrará a las 10am cada sábado de
la semana correspondiente
PROGRAMA
Capítulo 1
Tobe Hooper:
fabricando el terror cotidiano.
Capítulo 2
John Carpenter: el cine de terror es renovable.
Capítulo 3
Wes Craven: el miedo no está afuera…y otras paranoias.
Capítulo 4
George A. Romero: la modernidad como camino a la inhumanidad.
INICIO
Lunes 28 de octubre (miércoles 27
de noviembre fecha límite para acceder al contenido del curso)
MODALIDAD
Virtual – más de 5 horas de
material audiovisual y material digital complementario (películas, libros y
artículos)
COSTO
50 soles / 15 dólares americanos
/ 13 euros
(Modos de pago: https://bit.ly/CuentaCursoCine)
PROFESOR
Carlos Esquives – Crítico de cine
INSCRIPCIONES – INFO
fotogramagourmet@gmail.com / +51 980669941
lunes, 23 de septiembre de 2024
72 San Sebastián: My Eternal Summer (New Directors)
La fantasía de las vacaciones de verano se diluye en esta emotiva ópera prima. Una familia de a tres decide pasar la época veraniega en su casa de campo, tal vez la última para uno de sus miembros. Dirigido por Sylvia Le Fanu, My Eternal Summer (2024) nos cuenta la historia de unas personas despidiéndose de un ser querido. La naturaleza soleada de un escenario danés se convertirá en fondo de un advenimiento trágico, eventualidad que, ciertamente, un padre y una hija no enfrentarán de la misma manera. Estos tendrán que seguir y fingir con un programa de ocio mientras son testigos de cómo la enfermedad consume a uno de los suyos. La esposa y madre parece aproximarse a sus últimos días de vida. Le Fanu se inspira de los relatos sobre retiros. La huida a un espacio idealizado interpretado como un paliativo que pudiese persuadir el dolor, no físico, sino emocional, tanto del aquejado como de los celadores. Ahí están algunos clásicos de Ingmar Bergman, tales como Persona (1966) o Gritos y susurros (1972). Pero por encima de ello, la directora se inspira en una coming of age, a propósito de su doliente protagonista. Fanny (Kaya Toft Loholt), la adolescente y única hija de la familia, será foco de este drama en donde veremos a este personaje entrando en conflicto con las emociones propias de una chica de su edad y la impotencia ante el anuncio de un próximo duelo.